¿Fecundación in vitro o inseminación artificial?

fecundación in vitro, inseminación artificial

La fecundación in vitro es una técnica de reproducción asistida muy compleja utilizada para ayudar a las parejas o mujeres solas que presentan dificultades para conseguir un embarazo. El éxito de la fecundación in vitro depende de muchos factores, principalmente de la edad de la mujer y de que los espermatozoides tengan buena calidad.
Esta técnica consiste en la unión de un óvulo con el espermatozoide en un laboratorio (in vitro), con el fin de obtener embriones de buena calidad que puedan, una vez implantados en el útero materno, dar lugar a un embarazo.
Para realizar la fecundación in vitro se pueden utilizar óvulos y espermatozoides propios de la pareja o bien óvulos, esperma o embriones de un donante conocido o anónimo.

Cómo es el proceso de la fecundación in vitro
El proceso de fecundación in vitro consta de cuatro fases:

  • Estimulación ovárica: se estimula hormonalmente a la paciente de manera controlada para obtener una ovulación múltiple y, por lo tanto, una producción folicular múltiple que será controlada mediante ecografías. Cuando los ovocitos han alcanzado un diámetro de 17-21 mm, se realiza una punción ovárica para recuperar los ovocitos.
  • Punción ovárica: se realiza una vez se tenga constancia de al menos 3 folículos con diámetro mayor a 16 mm según la Ley 14/2006 (probabilidades razonables de éxito). Se extrae líquido folicular a través de una punción vaginal guiada con ecografía y se envía al laboratorio donde identificarán y clasificarán los ovocitos.
  • Fertilización in vitro: consiste en fecundar de manera artificial los ovocitos obtenidos durante el proceso anterior. Cada ovocito seleccionado se pone en contacto con unos 100.000 espermatozoides, también previamente seleccionados y preparados, dejando que la fecundación se realice sola. En determinados casos se inyecta un espermatozoide dentro del ovocito. Los ovocitos inseminados se guardan en un incubador con unas medidas ambientales controladas de humedad, temperatura y oxígeno. Pasadas 24 horas, se verifica su fecundación y durante 2 o 3 días se va controlando su evolución.
  • Transferencia de embriones: entre el 2º y 5º día de la punción ovárica, se introducen los embriones obtenidos en el laboratorio en el interior del útero bajo control ecográfico a través de un catéter. Después del procedimiento, la mujer debe guardar 24 horas de reposo.

Diferencias entre fecundación in vitro e inseminación artificial
La principal diferencia entre la fecundación in vitro y la inseminación artificial es el lugar donde se realiza la fecundación. Así, mientras que en la fecundación in vitro ya hemos visto que se realiza en el laboratorio bajo estricta vigilancia para posteriormente introducir el embrión en el útero de la madre, en la inseminación artificial la fecundación se realiza de manera intrauterina.
Otra de las diferencias es que la estimulación ovárica, en el caso de la inseminación artificial, es mínima con el fin de evitar embarazos múltiples.
Las posibilidades de éxito en la inseminación artificial son menores, aproximadamente el 15% por intento mientras que, en la fecundación in vitro, las posibilidades de éxito son mayores, llegando a veces al 60% de probabilidad de embarazo.

Ventajas y desventajas de la fecundación in vitro
Cuando se decide optar por una fecundación in vitro se deben considerar una serie de ventajas pero también se deben conocer las desventajas como:

  • Ventajas:
    - Las personas con problemas de fertilidad pueden tener un hijo biológico sin necesidad de recurrir a donantes de gametos.
    - Tasas de éxito más elevadas que otras técnicas de reproducción asistida.
    - Posibilidad de estudio de embriones en el caso de riesgo de alteraciones. genéticas hereditarias y así, mejorar la selección de los embriones con mayor viabilidad.
    - Facilidad de congelación de embriones sobrantes para futuros tratamientos.
    - Las mujeres solas y las parejas compuestas por mujeres pueden experimentar la maternidad.

  • Desventajas:
    - Mayor coste económico que otros tratamientos de reproducción asistida.
    - Variable en efectividad, pues influye la edad de la paciente o la calidad de gametos, entre otras.
    - Mayores riesgos asociados al procedimiento; como embarazo múltiple, parto prematuro y bajo peso al nacer, aborto espontáneo, embarazo ectópico, riesgo de hemorragia en la punción ovárica, etc.